ELECTRODOS - ELECTROESTIMULACIÓN

Le electroestimulación es una técnica muy utilizada en el ámbito del fitness y la estética. Se trata del uso de aparatos que, mediante impulsos eléctricos, provocan contracciones musculares y, como consecuencia, un efecto similar al que se obtendría ejercitando los músculos.
Se usa la electroestimulación como tratamiento adelgazante, aunque si la aplicación de esta técnica no se acompaña de ejercicio físico, los resultados pueden ser discutibles. Es una forma de hacer lo que se conoce como “ejercicio pasivo” y permite aumentar el tono muscular y mejorar la flacidez de los músculos aumentando su volumen, fuerza y resistencia.
El uso continuado y periódico de la electroestimulación -3-4 veces por semana-  como el ejercicio físico, obliga al cuerpo a generar más masa muscular. La síntesis de proteínas necesaria para generar esa masa muscular implica un gasto de energía, así que sobre la zona que trabajamos conseguimos sustituir masa grasa por fibra muscular.
BENEFICIOS: 
Mayor activación muscular y, por tanto, mayor contracción de las fibras. Se llegan a alcanzar fibras que no son posibles de alcanzar con contracciones voluntarias.
Los tratamientos de ejercicios pasivos cansan menos, por lo que se pueden hacer más repeticiones sin sensación de fatiga.
Aumento de fuerza y masa muscular. Esto se debe a lo que se trabaja principalmente son los músculos, por encima de las articulaciones. También se mejora la fuerza y la resistencia.
Mínimo riesgo de lesiones. Con la electroestimulación se consigue reducir considerablemente el riesgo de sufrir una lesión al no hacer ejercicios complicados ni ser mínimamente peligroso.
Mejora de la vascularización / capilarización. Está demostrado que este tratamiento ofrece una elevación de la circulación sanguínea, así como del riego linfático.
Aumento de la elasticidad muscular.
Eliminación de toxinas. Como con cualquier otro tipo de ejercicio, el ejercicio muscular es muy útil para eliminar las sustancias tóxicas del cuerpo.
Relajación muscular en periodos de estrés, lo que lleva aparejada una disminución del dolor.